Un importante golpe contra la delincuencia ha sido ejecutado por agentes de la Policía Nacional de Alicante y Málaga, junto con la Ertzaintza, tras desarticular un grupo criminal dedicado al robo de viviendas a nivel nacional.

En total, tres personas han sido detenidas y se han logrado recuperar numerosos objetos de valor, incluyendo joyas, teléfonos móviles y dispositivos electrónicos, así como herramientas especiales utilizadas para llevar a cabo los robos en más de 70 inmuebles, según informaron las autoridades policiales en un comunicado.

La investigación que condujo a estas detenciones y a la resolución de los robos comenzó de forma independiente por parte de los cuerpos de seguridad de Alicante y Málaga, pero pronto se detectó que los robos compartían un modus operandi similar, lo que llevó a la colaboración conjunta a través del Centro de Inteligencia contra el Terrorismo y el Crimen Organizado (C.I.T.C.O).

Tras un exhaustivo trabajo de seguimiento, los investigadores lograron identificar a dos de los sospechosos en los lugares de los robos, lo que dio pie a la detención de dos ciudadanos extranjeros que residían en Málaga y su conexión con una tercera persona encargada de almacenar los objetos sustraídos y ponerlos en el mercado ilegal.

El grupo criminal, con una estructura bien definida y jerarquizada, utilizaba vehículos de alquiler para sus desplazamientos y contaba con técnicas especializadas para abrir cerraduras modernas. Además, utilizaban identidades falsas y realizaban actividades para dificultar su investigación y eludir la acción de la justicia.

Los detenidos, dos hombres de Rumania y Bulgaria y una mujer española, cuentan con antecedentes por hechos similares y han sido puestos a disposición judicial en Fuengirola, aunque la investigación sigue abierta con el objetivo de esclarecer más delitos cometidos por este grupo delictivo.