La Guardia Civil ha desmantelado dos "granjas de humanos" en la Comunidad Valenciana, donde se retenía a siete personas vulnerables en condiciones precarias para controlar sus cuentas bancarias y acceder a sus viviendas.

Las detenciones de dos hombres y una mujer, de entre 30 y 35 años, revelan una trama que operaba principalmente en las comarcas de L'Horta y La Ribera, captando a personas en situación de vulnerabilidad y dependientes de ayudas económicas.

Estas víctimas eran despojadas de su documentación, retenidas por la fuerza en viviendas en Torrent y obligadas a firmar documentos para que la organización criminal pudiera adquirir vehículos de lujo y propiedades para lucrarse a costa de los más desfavorecidos.

La red se dirigía especialmente a personas con adicciones o discapacidades psíquicas graves que carecían de apoyo familiar y se encontraban al borde de la indigencia. El líder de la banda utilizaba la violencia y el miedo para someter a sus víctimas, mientras su pareja gestionaba el dinero obtenido de manera ilícita.

El descubrimiento de la primera información durante el desalojo de viviendas ocupadas desencadenó la investigación que permitió a los agentes desarticular esta red de explotación de personas vulnerables en la zona de Valencia. Tras la liberación de siete víctimas retenidas en condiciones inhumanas, se han practicado las detenciones pertinentes.

La intervención de la Guardia Civil en Torrent ha culminado con la liberación de las personas vulnerables y la incautación de pruebas incriminatorias, entre las que se encuentra un arma de fuego utilizada para amedrentar a las víctimas. Los detenidos enfrentan cargos por extorsión, blanqueo de capitales y pertenencia a organización criminal, y las diligencias judiciales ya han sido remitidas al juzgado correspondiente.