En una jornada marcada por los esfuerzos de extinción del incendio en la planta de reciclaje de San Antonio de Requena, el presidente de la Diputación de Valencia, Vicent Mompó, resaltó que en este momento la prioridad es cubrir las zonas afectadas con tierra para evitar la reactivación de las llamas. A pesar de la intensidad del trabajo, Mompó advirtió que los bomberos necesitarán al menos dos semanas más para dar por finalizada la extinción del fuego, lo que requiere de paciencia por parte de todos los involucrados.

Estas declaraciones fueron realizadas por Mompó durante su visita a la planta de reciclaje de San Antonio de Requena, donde el Consorcio Provincial de Bomberos de Valencia está coordinando los esfuerzos de extinción desde que el incendio comenzó el pasado 15 de abril. El presidente de la Diputación estuvo acompañado por importantes figuras como el inspector jefe del Consorcio Provincial de Bomberos, José Miguel Basset, y el diputado de Medio Ambiente, Avelino Mascarell.

Según Mompó, en esta etapa del proceso de extinción se está enfocando en cubrir las áreas incendiadas con tierra, un trabajo que está siendo supervisado de cerca por el equipo de bomberos desplegado en la planta. Por su parte, Basset señaló que se está trabajando en acortar los tiempos al disponer de tierra más cercana, avanzando según la planificación técnica establecida.

Además, se ha confirmado que no se han superado los límites de seguridad en cuanto a la calidad del aire en la zona, manteniendo así la precaución necesaria. Desde que el incendio inició, el Consorcio Provincial de Bomberos de Valencia ha movilizado recursos significativos para hacer frente a la emergencia, incluyendo la solicitud de una estación de control del aire.

Los esfuerzos de extinción han pasado por dos fases distintas, desde el trabajo inicial con los medios habituales hasta la necesidad de utilizar maquinaria pesada en una fase posterior. Sin embargo, la prevención sigue siendo clave en esta etapa, con un dispositivo activo mientras se llevan a cabo los trabajos de cubrimiento con tierra supervisados por el Centro de Coordinación de Emergencias de la Generalitat.

Los bomberos seguirán presentes en la planta de manera preventiva hasta que concluyan las labores, manteniendo la colaboración con todo el personal involucrado para actuar rápidamente en caso de algún rebrote. Esta larga jornada de extinción ha requerido solidaridad y paciencia por parte de la comunidad, agradeciendo el esfuerzo de todos los implicados en esta ardua tarea.