La Fiscalía de Valencia, en línea con su compromiso de velar por la seguridad ciudadana, ha solicitado una pena de dos años de prisión para un hombre, teniente coronel de la Guardia Civil en situación de reserva y exresponsable de la intervención de Armas y Explosivos de la VI Zona. La acusación se basa en el almacenamiento de gran material pirotécnico en un local situado en los bajos de un edificio en Paiporta, sin las medidas de seguridad adecuadas para su conservación o manipulación.

Asimismo, la Fiscalía también ha requerido la misma pena de cárcel para el hijo del acusado, quien es experto en manejo de artefactos pirotécnicos, por un delito de riesgo por materiales. Además de la pena de prisión, se solicita el pago de una multa. Sin embargo, el juicio que estaba previsto para este miércoles ha sido aplazado debido a una nueva pericial y a un problema de salud.

Según la calificación provisional, los acusados realizaban mezclas de materias primas en una pirotecnia y posteriormente trasladaban la sustancia elaborada a un local en Paiporta. En dicho local, que carecía de las medidas y condiciones de seguridad necesarias, se llevaba a cabo la manipulación y almacenamiento de la sustancia elaborada, así como la fabricación de artefactos pirotécnicos tipo P2.

Es importante destacar que este local se encontraba en una calle rodeada de viviendas y frente a un parque público, en una transitada arteria de Paiporta. El riesgo potencial de explosión era alto, ya que se encontraba almacenado junto a una gran cantidad de material combustible y se hallaron varias cajas de cartón con cápsulas del producto terminado, algunas de gran tamaño, así como recipientes con la sustancia a granel.

El registro practicado en el local permitió la intervención de una gran cantidad de producto elaborado y material confeccionado para cargas, que estaban almacenados sin las medidas de seguridad adecuadas. La Fiscalía destaca que la presencia de humedad y polvo en suspensión, sumado al riesgo de chispa, llama o fricción, podría haber ocasionado una explosión con consecuencias graves para las personas.

En definitiva, se trata de un caso en el que se pone en riesgo la seguridad de los ciudadanos debido al manejo y almacenamiento inadecuado de material pirotécnico. La Fiscalía solicita una pena proporcional a la gravedad de los hechos, con el objetivo de preservar el bienestar y la integridad de la sociedad.