En una impactante noticia, la joven de 22 años que admitió haber asesinado a su madre en abril de 2020 ha sido encontrada culpable por un jurado de asesinato con alevosía y ensañamiento en un trágico suceso que conmocionó a la localidad valenciana de l'Alcúdia de Crespins. La víctima, que se encontraba durmiendo en el sofá cuando fue atacada, no tuvo oportunidad de defenderse ante los padecimientos sumamente dolorosos y no necesarios que sufrió.

Además, el jurado también la ha declarado culpable de robo, ya que tanto ella como su entonces pareja convivieron con el cadáver de la víctima durante varios meses, violando las restricciones sanitarias por la pandemia de Covid-19.

Tras la revelación del veredicto por parte del jurado, ahora será la Audiencia de Valencia la encargada de determinar la pena correspondiente para la joven, que se espera sean los mínimos establecidos por ley para los delitos imputados.

Las penas solicitadas inicialmente por el ministerio público han sido rebajadas tras la confesión de la acusada, lo que ha generado controversia en torno al caso. La joven, durante su declaración, admitió su participación en el crimen pero señaló a su entonces pareja como el iniciador de la agresión.

En esta trágica historia también estuvo involucrado el novio de la joven, quien en ese momento era menor de edad y ya ha sido juzgado y condenado por los hechos.

Los hechos se remontan a un plan macabro urdido por la joven y su pareja para acabar con la vida de la madre de la acusada, alegando desencuentros previos y dificultades económicas.

El brutal crimen tuvo lugar en la vivienda de la víctima, donde los acusados llevaron a cabo un ataque sangriento que culminó con el fallecimiento de la madre. Posteriormente, robaron su tarjetas de crédito y sacaron grandes sumas de dinero antes de convivir con el cadáver durante varios meses.

Finalmente, tras una denuncia de personas cercanas, la Guardia Civil descubrió el horror que se escondía en la casa y detuvo a los responsables. Ahora, la joven enfrenta un futuro incierto en manos de la justicia.