La unidad de Endoscopia Digestiva del Hospital Universitari i Politècnic La Fe de València ha dado un paso importante en la detección precoz de cáncer colorrectal y otras lesiones en el colon al incorporar la inteligencia artificial. Bajo la dirección de Vicente Pons Beltrán, el equipo ha estado utilizando módulos de endoscopia inteligente durante un año, lo que ha mejorado significativamente la precisión en la detección de posibles lesiones. Diversos estudios han demostrado que esta tecnología puede aumentar la detección de lesiones hasta en un 40 por ciento para los endoscopistas menos experimentados.

Estos sistemas de inteligencia artificial brindan apoyo a los gastroenterólogos durante las colonoscopias, independientemente de su nivel de experiencia. Son capaces de detectar automáticamente y en tiempo real pólipos colorrectales de cualquier tamaño y forma. Además, uno de los sistemas puede ayudar a predecir el tipo de lesión que se trata. Según la Generalitat, estos sistemas sirven como "un segundo observador" y un mecanismo de apoyo para endoscopistas con menos entrenamiento.

En el transcurso del primer año, el sistema de inteligencia artificial centrado en la caracterización se ha utilizado en más de 100 colonoscopias, con resultados positivos al aumentar la seguridad diagnóstica, especialmente en lesiones muy pequeñas. Sin embargo, Pons enfatiza la importancia de expandir las bases de imágenes utilizadas para entrenar los dispositivos, a fin de perfeccionar el reconocimiento de lesiones, especialmente las más pequeñas, y su clasificación.

Los equipos incorporados en La Fe utilizan algoritmos de aprendizaje autónomo que han sido entrenados por las propias compañías desarrolladoras. Esta mejora continua permite alertar al endoscopista en tiempo real cuando se visualiza en pantalla una sospecha de lesión de colon.

El gerente del departamento de salud Valencia La Fe, José Luis Poveda, destaca que "la inteligencia artificial es una herramienta clave en la transformación del sector salud" y añade que en La Fe apuestan por su implementación tanto en investigación como en la práctica clínica. Poveda subraya que, bien empleada, la inteligencia artificial beneficia a los profesionales sanitarios, a los pacientes y al sistema sanitario en general, ya que contribuye a la optimización de procesos y recursos.