En una declaración reciente, el presidente de la Generalitat Valenciana, Carlos Mazón, ha defendido la proposición de ley de "libertad educativa" presentada por el PP y VOX en Les Corts. Esta ley permitiría a los padres elegir la lengua en la que desean que sus hijos sean educados, con el objetivo de equiparar en libertad e igualdad al valenciano con el castellano, dando la última palabra a los padres.
Tras reunirse con la presidenta de la Diputación Provincial de Castellón, Marta Barrachina, Mazón enfatizó la importancia de la libertad educativa y la participación de los padres en la toma de decisiones sobre la educación de sus hijos.
"Queremos que los padres decidan y no los despachos intervencionistas de los políticos", afirmó Mazón, destacando la eliminación de la "oficina de la policía lingüística" en la Comunitat Valenciana y la necesidad de respetar las preferencias lingüísticas de todas las familias en la región.
El presidente Mazón subrayó la importancia de equiparar en libertad y en igualdad al valenciano con el castellano, asegurando que esta medida promueve la libertad y la competitividad de los alumnos en la Comunitat Valenciana.
Asimismo, los síndics de PP y VOX anunciaron que la ley de "libertad educativa" regulará la elección de la lengua en los centros educativos, buscando acabar con la imposición del valenciano y dando la posibilidad de elegir a las familias en toda la región.
Con el objetivo de aplicar plenamente esta norma en el curso 2025-2026, se implementarán medidas como la certificación automática de titulaciones de valenciano para aquellos alumnos que superen esta asignatura. La proposición busca garantizar la no discriminación de ninguna de las dos lenguas cooficiales y respetar la diversidad lingüística en la región.
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