En València, la Guardia Civil ha llevado a cabo una operación que ha culminado con la detención de un hombre y la investigación de otras 18 personas involucradas en el hurto de 1.800 kilos de cítricos, principalmente naranjas y mandarinas, en diferentes zonas de la Costera y la Ribera Alta. Según el comunicado emitido por el instituto armado, los implicados vendían la fruta directamente en establecimientos cercanos para obtener ganancias de forma inmediata.

El valor de los cítricos en esta época elevó el beneficio de las sustracciones, lo que llevó a la Guardia Civil a intervenir un total de 1.800 kilogramos de naranjas y mandarinas durante las operaciones policiales.

La investigación se centró en los puntos de compra donde los presuntos delincuentes obtenían beneficios económicos, y se descubrió la existencia de documentación falsa utilizada para poder vender los cítricos. Esta documentación era presentada en los establecimientos como justificación de la procedencia de los productos.

El 'modus operandi' de los investigados consistía en que algunos de ellos permanecían en los campos para recolectar los cítricos robados, y luego avisaban al conductor de la furgoneta para cargar rápidamente la fruta y llevarla al punto de venta. Esto complicaba que fueran descubiertos durante el proceso gracias a la ocultación de los vehículos utilizados.

La persona detenida es un hombre de 41 años de nacionalidad rumana, mientras que los 18 investigados son 15 hombres de entre 20 y 63 años de nacionalidades española, rumana y marroquí, así como tres mujeres españolas de entre 21 y 62 años. Se les imputan 18 delitos de hurto y cuatro de falsedad documental, y las diligencias correspondientes han sido entregadas al Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 1 de Alzira (Valencia).