El secretario general del PSPV y expresidente de la Generalitat, Ximo Puig, ha criticado al Consell por intentar silenciar el problema discriminatorio de la violencia machista después de adoptar la negación de Vox. En lugar de eso, ha instado a reflexionar para avanzar en la superación del machismo y ha destacado que es "orwelliano" hablar de violencia intrafamiliar en lugar de violencia de género.

En el Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer, Puig ha llamado a avanzar en la superación del machismo y su manifestación más terrible, la violencia. Ha acusado a la Generalitat de adoptar el negacionismo machista de Vox y tratar de silenciar el fenómeno discriminatorio de la violencia machista. Además, ha denunciado que el término violencia de género ha desaparecido de los presupuestos de la Conselleria de Justicia.

El dirigente socialista ha lamentado que la primera reunión de la titular de este departamento, Elisa Núñez, de Vox, haya sido con la Asociación para la Defensa de Hombres Maltratados, lo cual considera un insulto a las mujeres. Según Puig, se ha roto la unidad en esta causa al apartarse de las pancartas que rechazan la violencia de género, y ha criticado que dos condenados por violencia de género hayan ocupado cargos de alta responsabilidad en el Consell y en la negociación del Gobierno valenciano.

Puig ha advertido que el ser equidistante es ser cómplice de una violencia que ha provocado el asesinato de 150 mujeres en 20 años en la Comunidad Valenciana y que motiva 74 denuncias cada día, tres cada hora. Se ha preguntado por qué esto no lleva a la gente a salir a la calle ni a exigir una sociedad en paz.

Por todo esto, ha exigido a la Generalitat que cumpla los acuerdos políticos, los avances legales y la concienciación ciudadana de los últimos 20 años sin retroceder, y ha insistido en que el respeto democrático y la condena clara y el combate real contra la violencia de género deberían ser los primeros puntos en una agenda valenciana.

En un acto del PSPV, Puig ha defendido que la lucha contra la violencia de género no es una cuestión partidista, sino de toda la sociedad, y ha instado a abordar la causa del problema, argumentando que los asesinatos no ocurren debido a la violencia, sino a una ideología machista hegemónica. Por lo tanto, ha reflexionado que no se acabará con la violencia machista si no se acaba con la ideología machista.

En relación con aquellos sectores de la derecha que acusan de utilizar la "ideología de género", Puig ha destacado que efectivamente hay un problema ideológico detrás de la violencia machista. Por lo tanto, ha instado a no pasar por alto los micromachismos y las situaciones que pueden parecer menos importantes para abordar estos hechos.

En el marco del 25N, el PSPV ha impulsado la firma de un decálogo contra la violencia machista que se promoverá en todos los municipios de la Comunidad Valenciana para seguir luchando contra esta lacra. Los socialistas valencianos han prometido alzar la voz contra aquellos que niegan la violencia machista y echan leña al fuego que ellos quieren apagar.