El secretario general del PSPV y senador, Ximo Puig, ha expresado su preocupación por la falta de aceptación por parte del Partido Popular (PP) y Vox del resultado electoral. Puig ha instado a estas formaciones políticas a desempeñar una oposición "digna, decente y potente".

En declaraciones antes de la sesión de investidura de Pedro Sánchez, a la que asiste, Puig ha destacado que la agenda valenciana está incluida en los acuerdos de gobierno que respaldan al candidato socialista como presidente del Gobierno.

El dirigente del PSPV ha afirmado que hay posibilidades de cambiar el modelo de financiación, condonar la deuda y llevar a cabo un plan de inversiones generoso para la Comunitat Valenciana. Según Puig, con la investidura de Sánchez, se abrirá una nueva etapa de progreso para España.

Puig ha expresado su convicción de que Sánchez liderará un proyecto progresista, y ha hecho un llamado a rebajar la tensión política ante los "excesos" que se están produciendo en los últimos días.

El político socialista ha denunciado la normalización de los exabruptos de la extrema derecha y ha pedido "calma y serenidad" para volver a la normalidad lo más pronto posible.

Según Puig, tanto la derecha como la ultraderecha no han aceptado el resultado electoral, lo cual es perjudicial para el funcionamiento del sistema democrático. Ha enfatizado la importancia de que la oposición acepte los resultados y sea una oposición digna, decente y potente.

El líder del PSPV ha señalado que, aunque considera al gobierno formado por PPCV y Vox como el más reaccionario de la historia, no cuestiona su legitimidad. Sin embargo, manifestó la intención de combatirlo por considerarlo perjudicial para la Comunitat Valenciana.

Sobre la proposición de ley de amnistía en Cataluña, Ximo Puig ha afirmado que es una propuesta ajustada a la Constitución y busca promover la normalidad y la concordia en la región.

En cuanto a su futuro político, Puig ha dejado claro que es una decisión que corresponde a Pedro Sánchez tomar.