VALÈNCIA, 5 de noviembre. Este martes marca el primer aniversario desde que la devastadora DANA golpeara con fuerza la Comunitat Valenciana, dejando hasta ahora un trágico saldo de 211 fallecidos y severos estragos materiales en alrededor de 70 localidades de la provincia de Valencia. Aun hoy, los esfuerzos de los equipos de rescate y los voluntarios continúan, con la retirada de escombros, vehículos y achiques de agua que son una realidad diaria para los afectados.

Según el Centro de Coordinación de Emergencias (CCE), la situación de recuperación continúa con vecinos, voluntarios y miembros de los cuerpos de seguridad colaborando en la limpieza de las áreas dañadas. Se están revisando las estructuras de los edificios, así como los cauces, carreteras y vías ferroviarias, sin olvidar las instalaciones esenciales para la distribución de agua, electricidad y gas, que también han sido sometidas a exhaustivas inspecciones.

En un giro positivo, se ha logrado restablecer el 98% del suministro eléctrico, mientras que el 93% de los residentes afectados ya cuenta con acceso al agua. No obstante, se aconseja utilizar agua embotellada para el consumo humano, permitiendo que el resto del suministro se use para tareas de limpieza.

En cuanto a la red viaria, la situación sigue complicándose, dado que permanecen cortadas varias carreteras clave en la provincia. Entre ellas, la A-7, en el tramo de Quart de Poblet a Torrent; la N-3, en Siete Aguas; además de varios tramos de la CV-33 y la CV-36. También se enfrenta a restricciones la A-3 en localidades como Chiva y Requena. En Castellón, las vías CV-134 y CV-137 permanecen cerradas.

El Cecopi ha decidido mantener las limitaciones de circulación para gestionar el riesgo de congestionamiento en las principales arterias de Valencia. Se recomienda a la ciudadanía optar por el teletrabajo y, en la medida de lo posible, evitar el uso de vehículos privados. En un esfuerzo por facilitar el desplazamiento, la Generalitat ha puesto en marcha 12 nuevas líneas de Metrobús como alternativa al servicio de Metrovalencia.

Los municipios más afectados por esta catástrofe natural incluyen Alaquàs, Albal, Alborache y muchos otros, sumando una larga lista que señala la magnitud del impacto en la región. Esta serie de localidades se extiende desde Alcàsser hasta Llíria y abarca numerosas áreas rurales y urbanas, reflejando la devastación provocada por la DANA.

En total, más de 1.700 bomberos pertenecientes a 42 organismos y alrededor de 6.700 militares están desplegados en la zona afectada, con expectativas de que el número ascienda a 7.800 en breve. Esta significativa movilización resalta la urgencia y la necesidad de asistencia en la región tras el desastre.

En el ámbito de la seguridad, las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado han conseguido desplegar un contingente de 6.000 efectivos de la Policía Nacional y la Guardia Civil, a los que se suman más de 400 agentes de distintas policías locales y 103 efectivos de la Policía de la Generalitat, conformando un robusto dispositivo de seguridad y ayuda.

La búsqueda de posibles víctimas continúa, apoyada por el uso de drones que surcan el cielo, especialmente sobre las zonas del río Magro y la Rambla del Poyo, complementándose con unidades caninas para dar con cualquier rastro que permita identificar a desaparecidos. Desde que se activó el Procedimiento de Múltiples Víctimas, se ha mantenido el balance de 211 víctimas mortales, mientras el proceso de identificación continúa su curso.

Por último, las autoridades han levantado la alerta amarilla por lluvias y tormentas en el norte de Castellón, aunque se mantiene la situación 1 del Plan de Inundaciones en la misma provincia y situación 2 en toda la provincia de Valencia, reflejando la necesidad de seguir en alerta ante posibles eventualidades climáticas que pudieran surgir.