La alcaldesa de València, María José Catalá, ha anunciado una serie de medidas para regular el turismo en la ciudad. En primer lugar, se suspenderán de manera cautelar durante un año, prorrogable a otro, las licencias para apartamentos turísticos situados en comunidades de propietarios y en bajos comerciales. Además, se tiene la intención de limitar la llegada de megacruceros a València en 2026.

En el marco del encuentro 'Somos +' organizado por el diario Las Provincias, Catalá ha destacado la acción de su gobierno, formado por el Partido Popular y Vox, en contraposición a la "pasividad" del gobierno anterior liderado por Compromís y PSPV. Se busca controlar el crecimiento de los apartamentos turísticos en la ciudad.

En el próximo pleno ordinario del ayuntamiento, se presentará una iniciativa para la suspensión cautelar de licencias de apartamentos turísticos, afectando aquellos situados en comunidades de propietarios y bajos comerciales. Se enfatiza que esta medida no aplica a edificios completos de apartamentos turísticos equiparables a hoteles, ni a zonas como El Cabanyal y Ciutat Vella que tienen regulaciones propias.

Catalá ha criticado la inacción del gobierno anterior en materia de apartamentos turísticos, destacando la falta de inspecciones y medidas efectivas. En contraposición, se han realizado 197 inspecciones en los primeros meses de su mandato, con 160 órdenes de cierre emitidas.

Respecto al turismo de cruceros, Catalá ha expresado que "depende del crucero", señalando que los megacruceros son perjudiciales para la ciudad. Por ello, se plantea limitar su llegada a València en 2026, manteniendo la posibilidad de recibir cruceros más pequeños que generen beneficios para la ciudad.