València, 22 Ene. - El centro de València se ha llenado de alegría y festividad este lunes con motivo de la celebración del patrón de la ciudad, San Vicente Ferrer. El programa de eventos incluyó una procesión con la imagen plateada del santo, una "mini-mascletà" en la Plaza de la Reina y una misa en la Catedral presidida por el Arzobispo Enrique Benavent.

En su homilía en castellano y valenciano, Benavent elogió al patrón de la ciudad, resaltando su martirio y afirmando que "la luz de su fe y amor por el señor continúa viva en nuestras tierras y sigue dando frutos a la vida cristiana".

Agregó: "Esta fe debe ser nuestra inspiración para ser buenos ciudadanos, buscando la verdad, la justicia y el bien". En este sentido, el arzobispo destacó que "el camino que nos enseñan los mártires es el de la libertad para dar testimonio de la fe y resistir las pruebas y tentaciones del mundo". También pidió la intercesión de San Vicente Mártir para que "nos ilumine y no perdamos de vista el horizonte de esperanza al que Dios nos llama, dándonos fuerza para superar las pruebas que nuestra fe pueda enfrentar".

La eucaristía fue concelebrada por monseñor Manuel Ureña y monseñor Esteban Escudero, obispos eméritos de Zaragoza y Valencia respectivamente, acompañados por el Cabildo, miembros del Consejo Episcopal y sacerdotes de parroquias vinculadas a San Vicente Mártir.

En la celebración también estuvieron presentes la alcaldesa de València, María José Catalá, representantes de instituciones civiles y militares, así como de la Universidad Católica de Valencia "San Vicente Mártir" y diversas asociaciones vicentinas.

La alcaldesa declaró: "Siempre he defendido la importancia de que el máximo dirigente de la ciudad esté presente en los días del patrón junto a los valencianos. Por eso, me enorgullece estar aquí este año como alcaldesa de València".

Después de la eucaristía, tuvo lugar la solemne procesión con la imagen de madera plateada de San Vicente Mártir, una obra del escultor valenciano del siglo XVIII, José Esteve Bonet. La procesión recorrió los lugares cercanos a la Catedral que están vinculados al santo.

A continuación, el arzobispo presidió en la parroquia San Esteban de Valencia la misa con la celebración del bautismo del niño Cayetano Vicente. Este acto conmemora el bautizo de San Vicente Ferrer que también se llevó a cabo un 22 de enero y fue organizado por la Asociación de la Pila Bautismal de San Vicente Ferrer.