En un conmovedor acto de reconocimiento, Salomé Pradas, ex consellera de Interior y Justicia de la Generalitat Valenciana, ha comparecido este lunes en el Congreso, donde no ha podido contener las lágrimas al dirigirse a las víctimas de la devastadora dana de 2024. Su intervención se tornó especialmente emotiva cuando se disculpó por no haber podido ofrecer una respuesta más contundente ante la tragedia que azotó a la comunidad en octubre de ese año. "Este peso lo llevaré conmigo para siempre", expresó visiblemente afectada.

A pesar de su situación jurídica en relación con la investigación sobre la gestión de la crisis, Pradas optó por no invocar su derecho a eludir preguntas, lo cual le permitió reiterar su arrepentimiento. Su oportunidad llegó durante la intervención del portavoz de ERC, Gabriel Rufián, quien le preguntó si deseaba disculparse en su comparecencia. Con sinceridad, Pradas respondió: "Lamento profundamente no haber podido hacer más; es una carga que me acompañará toda mi vida."

El momento tuvo un impacto aún mayor cuando Rufián, al abordar la falta de respuestas sobre el trágico suceso, hizo una fuerte acusación hacia Pradas, insinuando que su silencio denotaba falta de empatía. Para subrayar su punto, el representante de ERC le entregó una cuerda simbólica utilizada por una niña de origen chino que falleció en la riada. Esta cuerda había sido enviada por los familiares de las víctimas con el encargo de que se la hiciera llegar al ex presidente valenciano, Carlos Mazón. Como su transferencia había sido pasada por alto, Rufián asumió la responsabilidad de entregársela directamente a Pradas.